domingo, mayo 30, 2004

HUMOR DE MADRUGADA


Sherlock Holmes y el Dr Watson se fueron en un viaje de camping. Luego de una buena comida y una botella de vino se despidieron, se acostaron y se durmieron.

Algunas horas más tarde, Holmes se despertó y codeó a su fiel amigo: "Watson, mira el cielo y dime qué ves"

Watson contestó:
-"Veo millones y millones de estrellas..."

-"¿Y eso qué te dice?"
Watson pensó por un minuto...

-"Astronómicamente, me dice que hay millones de galaxias y potencialmente billones de planetas, lo cual me dice también, que no estamos solos."

-"¿Y eso qué te dice?"
Watson pensó por un minuto más y dijo...

-"Astrológicamente, veo que Saturno está en Leo..."

-"¿Y eso qué te dice?"

-"Cronológicamente, deduzco que son aproximadamente las tres y diez de la madrugada."

-"¿Y eso qué te dice?"

-"Teológicamente, puedo ver que Dios es Todopoderoso y que somos pequeños e insignificantes..."

-"¿Y eso qué te dice?"

-"Meteorológicamente, sospecho que tendremos un hermoso día mañana..."

-"¿y a todas estas, eso qué te dice ?"

-¿Y a usted qué le dice?"

-"¡¡¡Que nos robaron la carpa, pendejo!!!"

sábado, mayo 29, 2004

Y AL FINAL, DE QUIEN ES LA CULPA


Cuándo salgo a la calle y espero el transporte en cualquier parte, y el bus se detiene y me recoge en cualquier parte, y me obliga a subirme por cualquier puerta, de quien es la culpa ?

… del peatón, del chofer ?

Cuando el chofer, con el cupo completo se apresta a seguir subiendo peatones que lo requieren en cualquier sitio, y los recoge, y los acomoda en sitios imposibles del vehículo, de quien es la culpa ?

….del bus,del peatón, del chofer, del propietario ?

Cuando el bus recorre enloquecido estas calles bogotanas que a veces parecen sin dios y sin dueño, ante la mirada impávida de agentes de tránsito igualmente imperturbables, preocupados principalmente por su traje verde fosforescente de estreno, y los ven hacer, y los ven correr, y como que no los ven, de quien es la culpa ?

…. del bus,del peatón, del chofer ,del propietario, de los agentes de tránsito ?

Cuando el chofer, enloquecido por el reloj de cuadras que aún le faltan para cumplir su itinerario, se olvida de los pasajeros y empieza a dejarlos donde dios pueda, casi expulsándolos por la puerta trasera abierta de par en par, luego de una frenada grotesca, de quien es la culpa ?

…. del bus,del peatón, del chofer ,del propietario, de los agentes de tránsito, del reloj ?

Cuando el chofer, entre humos y chasquidos y masticaciones sonoras, permite a los vendedores ambulantes del transporte público ofrecer sus mercancías al mejor postor, por cualquier monedita, a través de personajes irrecuperables que venden más por agresión visual que por marketing, de quien es la culpa ?

…. del bus,del peatón, del chofer ,del propietario, de los agentes de tránsito, del reloj, del vendedor ambulante ?

Cuando casi finalmente, aprovechando un semáforo en rojo, aprovechando que la puerta trasera sigue de par en par, y aprovechando que el chofer no se imagina que me voy a bajar, y finalmente me bajo, o mejor, me lanzó, de quien es la culpa ?

…. del bus,del peatón, del chofer ,del propietario, de los agentes de tránsito, del reloj, del vendedor ambulante, de la puerta abierta ?

Cuando finalmente recupero la salud en la acera de cualquier calle bogotana, y puedo recomponer mi figura, y camino cansino hacia mi lugar de trabajo, pensando en mi osada subida al bus de la mañana, el afán del chofer en recoger todo lo que se moviera, y la descuidada labor del agente del tránsito esmeradamente trajeado, o del reloj mecánico y biológico que mueve el organismo del conductor, o el mismo vendedor ambulante que me vendió los bolígrafos en mil pesos, y hasta la puerta abierta de par en par junto a un eterno semáforo en rojo, entonces y solo entonces, puedo reconocer que la culpa fue de la puerta abierta de par en par, sin la cual no hubiera podido contar todo este cuento.



viernes, mayo 28, 2004

AVALUANDO INMUEBLES

Cuando se habla de avalúos, todos queremos saber, además de su costo como trabajo profesional, cuánto tiempo en el tiempo se extenderá su validez.

Se habla de una validez de un año, o valideces de seis meses, o de tres meses, o de dos meses, o de un mes, u ojala siguiera de quince días. Son las valideces relativas, que todos queremos extender en el tiempo, y que definitivamente valen lo que cada uno ha querido que valgan, o quizá lo que internamente queremos que valgan, como una extensión del costo de la operación avaluatoria.

Como un mal necesario, nacido de nuestra condición de comerciantes de todo y traficantes hasta de los sentimientos, no mandamos a hacer un avalúo sólo por la emoción instantánea y erótica de saber el costo instantáneo de un bien, sino que en nuestro estro interno, quisiéramos dos cosas: que su resultado fuera por un monto superior, y que adicionalmente, permaneciera en el tiempo, soportando quizá la afugia de su incremento, más que su decremento.

Pero porqué avaluar se volvió tan instantáneo, como los chocolates actuales, y su concepción choca contra el deseo común de su permanencia en el medio y en el tiempo ? El gran invento del hombre, la economía de mercado, ha surcado el tiempo y las distancias, y nos han hecho igualmente sus victimas, hablo de los propietarios y de los avaluadores.

Las cosas valen lo que valen, y su costo será un poco menos o un poco más, conjugado todo con la necesidad atroz que pueda sacudir a su propietario. Y complementariamente, por encima de toda concepción maniquea, el avalúo debería señalar un monto igual al que estaría dispuesto a pagar el avaluador si estuviera en condiciones de comprarlo, o del valor recomendable que estaría dispuesto a aconsejar para su adquisición.

¿ Vale la pena por tanto avaluar para conocer el precio de un bien, ya sea para vender, o para comprar, o así sea por el sólo prurito de necesidad de saber que vale algo ? Sí vale, en una actividad tan digna como hace arepas, o inflar globos para su venta en uno de nuestros parques, porque su elaboración tiene tanto de ancho por lo que debe mirar el avaluador, y de profundo, por la misma aventura de ofertarse en el tiempo para apretujar un valor, rebullirlo en su mente inicialmente, y finalmente provocarlo y discernirlo, para verterlo en un informe repensado y profético, que entrega unos resultados numéricos que parecen salidos de un sombrero de mago de función sobre el hielo.

Por la magia que irradian los avalúos sólo deberían ser desarrollados y concebidos por los prestidigitadores del conocimiento experimental y técnico, para que en su condición de magos de los precios y del mercado, sugieran el rótulo del precio del metro cuadrado. Como es una labor que proviene de cierta solemnidad interior y de alguna profundidad divina, y de cierto señalamiento natural y avieso, diría que además de todas las condiciones conocidas y desconocidas que deben esgrimir los avaluadores, deberían tener una adicional: profética.

Pero en últimas, qué validez debe tener un avalúo en el tiempo ? Yo diría, que parodiando el tiempo, es mucho de hoy, algo de ayer, pero poquito de mañana, en una maraña intrincada de irresponsable dejo para no tomar la decisión de decir, que su validez es instantánea.

Y de nuevo la inasible ley del mercado vuelve y retoma la pauta de las cosas, contonea los precios futuros sobre los pasados, e inclina la balanza de lo avaluado sobre lo ofertado, contra el perfil de sus designios bamboleantes y certeros. Y entonces, cual fantasma desalmado que funge al sol que más calienta, se observa zigzagueante la voz trémula del demandante, que atosiga con su acoso económico los precios, los aprieta contra el muro de las urgencias, e inclina una balanza oxidada y rechinante hacia unos precios no contenidos en la evaluación: el valor del desconcierto y la urgente necesidad.

Qué factor aplicar a este parámetro del desconcierto y la urgente necesidad ? Un 0.75, como premio a la disponibilidad de efectivo para quien salve una situación delicada ? O un 0.60, como un sustancioso premio que asegure la operación, y que a su vez, sea el seguro para aseverar la efectiva consolidación de una negociación ? Y en últimas quien asegura que con estos valores se logra equilibrar el desequilibrio del precio final ?

Hasta en las zonas de conflicto, estos coeficientes tienen una actividad letal y arrolladora, que devasta los precios de los inmuebles, que los va moliendo, en una acción tan efectiva y devastadora, que pueden llegar incluso a valores que se aproximen a un coeficiente de 0.0 : el desplazamiento total.

Todo lo anterior para significar, que existe más de un factor que en últimas puede influenciar terriblemente o favorablemente, el valor final del avalúo de un inmueble.

¿ Pero en las Ciudades, deben operar igualmente tales factores, para que complementen la labor del avaluador, y puedan finalmente certificar el valor de un avalúo nacido de un estudio juicioso y certero de todos los elementos que normalmente y extracurricularmente inciden en una evaluación como la analizada ?

Si, y funcionar a través de tablas de aproximación, que verifiquen y avalen ciertas circunstancias que manipulan y manosean los precios, y los hace enloquecer lo mismo favorable que desfavorablemente, como en un tifón sin dirección que se mueve caótico hacia la línea de fuerza que más fortaleza muestre. Sí, y mil veces sí, porque de otra manera, diez avaluadores no serían capaces de ponerse de acuerdo, sobre cual sería el valor real de un bien inmueble sometido a tantas variables, que de por sí, en ocasiones siendo una sola, llega a tener definitivo poder decisorio en el precio final.

Entonces, a qué me atengo cuando pago por la elaboración de un avalúo ?

Primero, al criterio mágico y de confianza del avaluador de turno, del cual se espera que logre descifrar la realidad existencial de un predio, recibiendo a cambio del pago del estipendio correspondiente, el valor comercial del bien dado en evaluación.

Segundo, al vaivén de la situación económica del momento histórico en que se efectúa la evaluación, que de tornarse inestable, d e la misma manera hará inestable el valor avaluado, y solamente, y para el instante determinado tendrá la validez efímera dada.

Tercero, a que el valor recibido, es palabra de Dios, solamente para la situación analizada y actual, y sólo ocasionalmente, podría extenderse en el tiempo, hasta tanto la situación de mercado se mantenga en las condiciones estudiadas.


jueves, mayo 27, 2004

HISTORIA : Hoy hace 25 minutos

• Los señores legisladores de la grandes Cortes, en un arranque de sabiduría, y en un sobreesforzamiento mental, lograron en esta fecha aprobar luego de mil debates, la edad para el matrimonio de nuestros bebes: 14 años.

Y algo más: en otro arrebato climastérico, dejaron constancia que el trascendental fallo, se daba entre otra razón más, para uniformizar la misma legislación que en otro desarrebato había fijado para las damas como edad reglamentaria: doce años.

• Y los otros legisladores, los senatoriales y camaratoriales, andan en un desasosegado trabajo legislativo de reelección, con tal ímpetu e inigualado estropicio, que se olvidaron de las reales necesidades de la nación. Afortunadamente, el presidente, les ha pedido con cierto aire de autoridad compungida: a trabajar, a trabajar y a trabajar. Qué ejemplo de trabajo. Quizá en lo que no fue muy claro el primer mandatario de la reelección, es si el trabajar es en qué.

• Hay nuevas iniciativas para el Pico y Placa, y son nada más y nada menos que de nuestro preclaro alcalde, que cuando estaba en los estrados de la oposición hizo tal, con apoyo de transportadores y transportistas privados, jurando y rejurando que en una probable administración suya, ni por el chiras iba a estar de acuerdo con esa medida tan reaccionaria. Y más: la propuesta de hoy es la de un pico y placa de doce horas. ¿ qué tal la reacción de nuestro burgomaestre ? Desde esta columna se le propone a su aquilatada imaginación que rompa con el nombre, que no es de su cosecha, y por el contrario use uno como: chicha y limoná. Y por favor señor alcalde, no se haga el loco con su propuesta bandera: cambiar el color de los transmilenios.

• Y como la historia se repite, hoy de nuevo el sindicato de ECOPETROL logró llegar a un acuerdo con el gobierno nacional, en un arreglo de mutuo, donde los funcionarios del gobierno aburridos de la papa caliente que representa el sindicato famoso, aprobaron como siempre lo que el sindicato solicitó y éstos salieron a vociferar que finalmente la nación salió ganadora, porque ahora sí se había salvado ECOPETROL.. Si, definitivamente se salvaron las familias de los abnegados trabajadores.

• El precio del café colombiano al fin se cotizó en la bolsa de Londres y de Nueva York, logrando la vaporizadora cifra de 0.75 dólares por libra, precio que si no es el más elevado conquistado en la vida histórica de la cucurbitácea, si alcanzó un reconocimiento mundial porque con esos precios el café logró su precio de equilibrio, sí señores, es decir, que luego de tanto trabajo, tanta investigación y tanta perorata cafetera, a partir de la fecha, los cafeteros colombianos no vamos a ganar pero tampoco vamos a perder: el equilibrio perfecto, muy cercano a aquel otro famoso que no nos deja tranquilos: 90 – 60- 90.

miércoles, mayo 26, 2004

CALLEJEANDO




 La historia en Bogotá algún día dirá si la historia roja de transporte proyectada cumplió el propósito inspirado, o al contrario, fue una repetición de la historia del hombre: la saturación.

 Pasamos de las olas amarillas de antaño, a las olas rojas actuales, habiendo pasado igualmente por las olas verdes ya legendarias. Cuántos colores nos quedan ?

 Hoy vi tantos buses rojos por la avenida caracas, que me asustó su proyección al momento futuro próximo, cuando todas las troncales estén funcionando, y haya que legislar en contra de los buses rojos.

 Como no se debe esperar a que las cosas se pongan color de hormiga, propongo que le pongamos límite a la explosión demográfica, y evitemos que las hormigas nos invadan por estar dedicados a resolver los problemas de sobrepoblación.

 Nuestra gente no quiere aprender el beneficio de desplazarse siempre por la derecha, y prefiere hacerlo por donde mejor le plazca. Curiosamente cuando caminamos, cometemos las mismas infracciones que penalizamos en el transporte vehicular ya sea público o privado.

 Hay sitios, y días y especialmente horarios, en que se ven más perros que personas. He visto casos de una persona que tira de más de diez perros, y en esa jauría los perros parecen gozarse el espectáculo. ¿ serán algún día los perros mayoría, y nos impondrán la execrable tarea de tener que lavar sus suciedades porque el mundo agotó los parques y las zonas verdes ?

 Pero hay sitios cubiertos, y de los horarios ni hablar, donde se concentra tanta gente en apiñamientos por metro cuadrado tan monumentales, que uno quisiera que esas reuniones tuvieran un fin altruista, distinto a pedir a dios el perdón de los pecados y a oír cantinelas de oraciones que se repiten sin cansancio y ya ininteligibles.

 No he podido encontrar el primer conductor de transporte urbano que se interese por la carga transportada, y en cambio sí observa incansable cómo el cuenta pasajeros de su máquina registradora avanza.

 Se declaran los días de todo, pero nos quedamos esperando el día de nada, ¿ o será que el día de la nada es hoy ?

 Nos deben señores creadores de todo, el día del no gobernante, para ver si algún día nos sentimos libres.

 Y a propósito señor alcalde, si ya instauramos el día de NO HAMBRE, qué va a pasar con los otros días ? Porqué mejor no borramos el HAMBRE por decreto ?

lunes, mayo 24, 2004

VALENTIN EN FRESAS



Hoy el mundo es mejor que ayer, sencillamente porque es mejor ser que haber sido.

Los gusanos de mañana son los huevos de hoy.

No por más correr se llega más lejos, si no que lo diga el reloj de cuerda.

Hay formas fáciles de llegar a Dios, la más sencilla es decir adiós.

Los días por venir son menos monótonos que los que se viven en el instante presente, si no pregúnteselo a un estudiante.

Cada vez que llueve entiendo la bondad de no olvidar el paraguas, y mi agradecimiento no tiene igual si finalmente no llueve.

El sol fue el primer Dios del hombre, y también será su postrero.

Es más respetable el pecador que agacha la cabeza y devuelve el género, que el pecador que espera que sea perdonado y se gasta el género.

El amor es el mejor invento de la naturaleza para perpetuar la especie, solo que el hombre lo ha refinado tanto que lo ha transformado en aberración.

A veces saber es más dañino que no saber, o acaso no han visto el rostro de un sabio bajo los escombros de un derrumbe ? Ver el mundo hecho trizas le descompone el alma hasta al mas soberbio.

Antes la gente cantaba por naturaleza para agradecer su existencia a la naturaleza, hoy la gente canta por necesidad natural de sobrevivir y cobra.

¿ Si soñar no cuesta nada, porqué no compramos todo cuando dormimos ?

Los problemas de los países no se pueden resolver simplemente porque tratamos de resolverlos todos al tiempo, y es la única manera de no resolverlos sino de mantenernos ocupados.

La economía de los países pobres seguirá siendo pobre porque tratamos de resolverla con soluciones de países ricos.

Cuando encuentres un enfermo en tu camino, salúdalo y deséale suerte, algunos nos vamos primero que otros.

Si decides aportarle al mundo, hazlo en materia prima que es connatural y no en menaje que es transitorio.

Las madres son lo únicos seres que le han cumplido sobriamente a la naturaleza, los demás sólo somos observadores con reloj.


sábado, mayo 22, 2004

De LETIZIA a LETICIA


No solamente ganó Letizia en su matrimonio con el príncipe Felipe, sino que Colombia ganó en renombre internacional, no importa que un pequeño esguince ortográfico dañe los cientos de planos del país que circulan inanes por ahí.

Oh Letizia qué gran beneficio le haces al país, cuando sin proponértelo, en la propuesta que aceptaste por Jesucristo nuestro señor, llevas a Colombia adentro de tu renombrado nombre, no importa que siempre ese nombre tuyo vaya siempre condicionado al de plebeya.

No todo podía ser perfecto señores, alguna línea débil debía existir en la inapropiada boda, y seremos conocidos a nivel mundial por el parecido en el nombre, no importa el desastre de la oriundes de la dichosa Letizia, la otra, la ingeográfica, la posterior, la que en un afán de significación decidió torcerle el cuello a la ortografía geográfica para dejarla así, como tan periodística, como tan prosaica, como tan de pasarela.

Pero no importa, cambiaremos la historia de la patria, al igual que la Letizia decidió cambiar la suya en honor a la realeza, que en un afán de modernismo le introdujo modernidad en el matrimonio: el divorcio. Qué desquite Letizia, que lograste entregar tu incólume y silvestre y selvática floración al amor real y le dejaste a la realeza el otro, el cotidiano.

Y así como Leticia estuvo en nuestro país divirtiéndose como una loca con nuestro estrafalario mundo de música, parranda, licor y bacanales, así nos pagará en su mundo real con poner en alto su nombre Letizia, princesa de ensueño, que pasará a la historia como oriunda no de una familia prosaica de periodistas del chisme y maestros de arte, sino como sacada de un cuento de hadas de la gran amazonía que saltó sobre la proa del inmenso Felipe cuando este quiso bautizar el amazonas con sus aguas internas úreas de interiores de colores.

Y sobreaguará Letizia su nueva condición de esclava moderna del protocolo y la realeza, y dispondrá de su tiempo a gusto de los Borbón, y añorará a borbotones aquellos buenos tiempos cuando simple y mortal se desplazaba por los territorios de aquella otra Leticia que no le reclamaba nada, oronda, tranquila, vana y coqueta, con la seducción propia de las mujeres que lo tienen todo cuando lo tienen en la mente.

Gracias de nuevo Letizia, porque de ahora en adelante nos conocerán en el mundo, además de la Marihuana y la Coca, por aquella otra droga que en lugar de yagué deberá llamarse Letizia, así con zeta, porque la otra, la original, la Leticia es un simple error gramatical de la historia.

Ahora, sin envanecimientos, llegarás a la historia, para engrandecer un palmarés de infantes y príncipes, pero a la vez engrandecer una más de mitos y leyendas en nuestro suelo de lloronas y patasolas.


viernes, mayo 21, 2004

Una Ocurrencia de libro


Hoy, en razón a mi trabajo, me vi obligado a asistir a una diligencia de querella, que entre otras cosas tenía de querella, que unos propietarios se quejaban de otros porque simplemente no dejaban dormir.

Y las querellas se instauran como un mecanismo de defensa creado por el hombre para defender los derechos que han sido vulnerados, y que el famoso mecanismo permite o intenta restaurar.

Y en la santa paz que imparte la querella, pareciera como muy oportuna para el caso que me atrajo esta mañana.

Y hacer ruido parece que es uno de nuestras cualidades mejor desarrolladas, que se bate hombro a hombro con aquella otra: hacer basura.

Y pasamos tranquilamente, de una en otra: de hacer ruido a hacer basura, o de hacer basura a hacer ruido. Casi podíamos definirnos como unos animales racionales que ruidosamente hacemos basura, o si lo prefieren, unos basuriegos ruidosamente racionales. Y lo de racionales se lo colgué como remoquete de artificio, porque se pierde la racionalidad cuando demolemos contra nosotros mismos.

Y la dichosa diligencia, que enfrentaba grupos de hombres que tenían razones encontradas, miradas independientemente cada una de las razones, daba la razón a cada una de las partes, porque entre otras cosas, los unos alegaban que el ruido de los otros no los dejaba dormir en las noches, y los otros alegaban que su sustento provenía precisamente del arte de hacer ruido en las noches.

Sí, los grupos enfrentados eran: una comunidad en propiedad horizontal correspondiente a un edificio de apartamentos destinado a vivienda exclusivamente, y el otro grupo, un grupo de trabajo que manejaba una discoteca bar, que diariamente y sin descanso llevaba diversión lúdica a grupos de ciudadanos que por escandalosas sumas de dinero se sometían a bailoteos y consumos de licor hasta entradas las horas de la zanahoria. Sin embargo, tampoco iban más allá, y respetaban los horarios establecidos por el gobierno para pecar haciendo ruido, o hacer ruido pecando, o las dos, ya ni se sabe quien fue primero.

Dirán ustedes, pero la discoteca tenía licencia para hacer ruido ? Ríanse de la disputa equilibrada, pero si contaba con la licencia. Urbanísticamente cumplía con la licencia de construcción ? Regocíjense, que sí la cumplía. Entonces que hacer señor perito ? Ahí si como en el otro cuento, a correr, a correr.

¿Tenían razón igualmente los copropietarios residentes en el edificio vecino ? Sí, y a fe que la tenían grandemente, y contaron con mi apoyo secreto inconsciente aún antes que el Sr. Inspector iniciara el tramite de la querella en algo que denominan ampulosamente: audiencia pública. Sí, y ustedes secretamente también estarán de acuerdo conmigo: cómo darle la razón a un gremio que imparte ruido y vagancia y pecado y de noche ?

Luego de oír las razones y las sinrazones de las partes, unas entusiastamente, mientras otras con cara de haber dormido poco, y ante la perplejidad de un inspector metido entre las tablas de usar el poder para decidir, llegó a la aritmética decisión que las partes tenían la razón, y que mirada la situación dentro de su forma simple de mirar el mundo, las dos partes tenían la razón: la ley los protegía a los dos, y el desequilibrio que debía introducir la justicia para equilibrar el desequilibrio no lo podía ejercer su poder de inspector, poder ubicado en el primer escalón de una justicia que tiene como mil escalones.

Hasta un experto del insomnio que igualmente era residente en el edificio en querella, asistía a la audiencia con un cara de sueño tan grande que me vi precisado a recomendarle un tinto bien cargado.

Y no vayan a creer que mi capacidad de negociación solo se limitaba a hacer acto de presencia, y a oír y hacer ruido y a ganarme los honorarios de la actuación sin ni lo uno ni lo otro, no, estaba allí para convertirme en los ojos de la justicia, en el experto que podía con mis luces iluminar el ruidoso camino que las partes cumplidamente distendían y desglosaban a veces groseramente.

Y en el paroxismo de la audiencia, cuando ya las partes miraban para el techo en lugar del cielo como dicen los libros sagrados, el inspector con el alma en vilo me soltó la frase hecha como para salvar el mundo: Y a todas estas ingeniero, qué se le ocurre ?

Y no podía defraudar a un grupo de personas que casi por su innumero parecían una multitud, que con el corazón en la mano intentaban aplacar su ruido, no fuera a hacer parte de la demanda, y esperaban en un silencio casi sepulcral, casi el mismo que una de las partes solicitaba con urgencia, las palabras de ruido de una persona que ubicada por encima del bien y del mal debía tener la solución.

Hable ingeniero, por favor hable, pero sáquenos esta chicharra que ruidosa nos asola la tranquilidad y la paciencia……, alcancé a oírles musitar a unos cuantos residentes medio dormidos aún por el ruido que producen las audiencias públicas, y que no dejan que los asistentes duerman placidamente.

Y hablé, y expresé inicialmente mi complacencia por haber optado por la justicia como mecanismo de justicia, y hablé de la razón que técnicamente le correspondía a cada una de las partes, y hablé y me alargué hasta que ya el tiempo no permitía más, y ante una audiencia que esperaba adormilada una solución, espeté la más ocurrente que solucionaba la querella: que los señores de la discoteca, a partir de la fecha, doten a sus clientes de WALKMANS, que conectados inalambricamente ( cordless ) aun equipo principal dé el ruido suficiente a los usuarios de la discoteca y produzca el mejor silencio del mundo para los vecinos residentes.

Sí, señores, aceptado por todo el mundo asistente despierto y dormido, y a partir de la fecha, los señores querellantes se saludan amablemente, y recuerdan la querella como una anécdota vieja de cuento que narran y narraran a su descendencia.

lunes, mayo 17, 2004

Una fábula de Patria

Cuando en el otoño de sus regímenes y de sus vidas, Uribe, Marulanda y Bush finalmente acordaron reunirse para finiquitar la vida de la nación, en medio del fragor de los abrazos y del tintineo de las copas, la voz guerrera de Uribe supo expresar la solución inapelable que hacía años le golpeaba el pecho en su costado izquierdo, desde que el milenio se enseñoreó sobre la patria, y aún mas, a partir del momento en que la deuda pública empezó a tener carácter de impagable.

Sí, la nación no podía volver a pagar, ni siquiera podía volver a deber, porque hasta el último gramo de oro en polvo que reposó en las arcas del banco de la república, se había ductilizado y espolvoreado tanto que ya no era posible contabilizarlo.

Había que tomar decisiones de hombres, de auténticos estadistas, con la verrarquera del momento histórico, porque desde aquel minuto la vida de la nación ya no volvería a pender del hilo de marroquín y sus secuaces que fueron inferiores a su historia y a la patria, no, ahora los uribes y los marulandas vendrían a llenar la historia de la patria, así no más, con la decisión impostergable de la patria.

Y la voz de Uribe sonó por todas las calles de la patria, resonó por todos los municipios y departamentos, y siguió sonando por entre las cordilleras y los ríos amazonas y magdalenas, e incluso se explayó aún mas allá de los confines de la patria, y ya en la patagonia su esténtor era un aullido audible, pero se entendió claramente, y la oímos todos:

- Dr. Bush, le vendo la patria. …Se la vendo, Dr. Bush, porque hay cosas en la vida que no se deben hacer como los abortos prohibidos, pero salvar la patria no me arredra… Se la vendo, y acabemos de una vez por todas con esta deuda infinita que cada vez se recibe menos pero cada vez se debe más, como en la magia de los cometas que parece que nunca pararán. No se diga más, es una solución hablada con marulanda, y hasta él está cansado con esa carga de monte y armas y droga y proselitismo teórico.
- Jo, jo, jo….. Me impresiona su capacidad histriónica Dr. Uribe, acaso cree que haya alguna nación que quiera negociar su deuda externa regalándose a la potencia acreedora? ….Siguiendo el hilo de su pensamiento, y en los términos expresados por usted, si la vende ya le calculó algún precio, ya lo consultó, ya hizo caja con cada una de las personas involucradas ?
- Los cuarenta millones de compatriotas son suficientemente aplomados como para aceptar que luego de dos reelecciones, pueda yo disponer de la patria como si fuera mi heredad patrimonial, y ellos siempre saben que las determinaciones que yo tome siempre serán en bien de la patria y en provecho de cada uno de mis compatriotas. …….Se la vendo Dr. Bush, y es una decisión tomada, y es quizá la decisión más razonada que he tomado en el curso de mi agitada agenda vida política…. Se la vendo, y decidase cuanto antes, porque más de uno quisiera entrar en la licitación personal. …..Ok, o le da miedo, Dr Sin miedo?

Uribe y Marulanda se miraron cómplicemente, con esa mirada que solo se ve en las zonas de despeje de la nación, y expectantes esperaron la siguiente movida en el ajedrez cerebral del Dr. Bush.

- Y ha pensado Dr. Uribe que va a pasar con toda la gente de su país ? Por que no estará pensando en endosármela ?
- Ya pensamos en eso y en todo lo demás, Dr. Bush, proponga no más…
- Y qué quiere Dr. Uribe: tiempo, productos, dólares, euros o más deuda…
- Sólo recibiríamos euros o dólares, pero todo lo demás se lo regalamos.
- Bien Dr. Uribe. Supongamos que acordamos un precio. De ése precio me pagas las deudas y los intereses y los intereses de los intereses, y así sucesivamente. Cuándo me desocupan ?
- Pues nada mas que como en mi tierra, y en su tierra: cash y Money, o sea plata en mano y lo demás en tierra.

Uribe y Marulanda se miraron cómplicemente, con esa mirada que solo se ve en las zonas de despeje de la nación, y expectantes y mancomunados esperaron la siguiente movida en el ajedrez cerebral del Dr. Bush.

- OK Dr. Uribe, usted resultó mejor negociante que el Dr. Cándido, pero desgranemos el pensamiento. ¿ Cuánto vale su terruño ?
- OK Dr. Bush, ahora si habló usted como banquero. Bien, que le parece si a cada hijo de la patria le damos una suma de dinero, y a su entrega lo ponemos de patitas en un vuelo comercial que lo lleva al exterior ?
- Jo, jo, jo,,,, me hace reír nerviosamente Dr. Uribe, su osadía para salvar la patria es muy superior a la esgrimida por Hércules en sus doce trabajos, y nunca se me hubiera ocurrido tamaña ocurrencia… Je.., y cuanto es la suma que “ustedes” consideran necesaria para desalojar la patria como usted ampulosamente la llama ?

Uribe y Marulanda se miraron cómplicemente, con esa mirada que solo se ve en las zonas de despeje de la nación, y expectantes y mancomunados le espetaron la cifra, que iría a desnivelar la siguiente movida en el ajedrez cerebral del Dr. Bush.

- Son quinientos mil dólares por colombiano,…… lo cual incluye desde recién nacidos a la hora de la firma del Pacto y culminación del pacto, hasta enfermos terminales, locos, cuerdos, guerrilleros, policías, generales, maestros, sindicalistas, gays, drogadictos, estudiantes, campesinos, desplazados, políticos, etc…. Todo lo que se mueva en los confines de la patria, Dr. Bush…. Hechas las cuentas, da la miserable suma de 200 billones de dolares, y ustedes se hacen a un solar amplio, rodeado de una biodiversidad que solamente ustedes entienden…. OK ?

El acuerdo llegó finalmente, y en la patria, un día se vieron desfilar en todos los aeropuertos de la patria, a miles, no qué digo, a millones de colombianos que finalmente habían aprendido que es mejor la vida de turista sin hambre a la de patriota sin cinco y ad portas de la miseria. …. Bien lo habían entendido, Uribe y Marulanda, cuando se miraron por primera vez cómplicemente.

sábado, mayo 15, 2004

Qué CAMELLO

Cuándo los oftalmólogos finalmente pudieron respirar, faltaban cinco para las seis de la mañana, y se debía dar el diagnostico y la recomendación pertinente.

Su dictamen había sido juicioso y tajante: láser, y no lo habían dudado un instante, y lo de manos a la obra, fue un decir, porque su intervención fue de más rapidez que las apariciones y desapariciones del siglo anterior, o de las invasiones de película en rojo y verde de los gringos.

Habían salvado la patria, y misael estuvo listo a la hora convenida: 7 a. m.

Y no es de risas señores, el camello de la historia, estuvo listo para aventurarse por estos arenales del infierno, al rayar el sol en el oriente invariable, tal como quedó prometido. No había más. El primer camello con gafas del desierto.

A escaso kilómetro de iniciada la correría, ya misael se estaba refregando los ojos a cada paso, y ni siquiera las gafas oscuras dispuestas para la ocasión lograban evadirle la alborotada cantidad de arena que trataba de infiltrársele por entre los lentes de contacto. Y qué lentes, señores !, de color agua marina, elección tierna que fue el gran aporte femenino de la científica oftalmóloga, que quedó muy satisfecha una vez pudo llegar a tal elección de susto.

Dos cosas tenían enmohinado a misael, que no era de cuento, pero que el pobre no podía comunicar dado su legado genético invocabuler.

Uno, como dice alvaro, otro camello de avanzada, misael se distrajo tanto con la nueva tecnología, que vió más de lo que debía ver, y vió, señores, vió los oasis más cerca, ahí no más, y corría desaforado a su encuentro, y claro, los granos de arena se le acercaban más raudos, y más fuertemente se le entremetrían entre los parpados, bailoteándole los ojos, los lentes y los oasis.

Y dos, había algo más, y era que las gafas le mataban, si señores, le molían la parte lateral de su mula de camello, y así no se podía, y fue cuando el animal, pegó estampida loca, y voló por entre los arenales, y corrió por entre las dunas, y fue más rápido que la vista, hasta que sólo fue un punto aparte en el horizonte de los oasis.

Nunca nadie encontró las gafas de misael, y su desaparición tiene algo de magia de secuestro y de ascensión, y los oftalmólogos se quedaron viendo un chispero ante la imposibilidad de presentar a la comunidad científica su última revolución: laser y lentes de contacto para camellos.

viernes, mayo 14, 2004

Cuando los Muertos corren aguas arriba

En el periódico EL TIEMPO, sección 5-3 de VIVIENDA del sábado 8 de mayo de 2004, la redactora Ingrid Mora, se despacha con un suculento titular de feria: “dictámenes que cuestan..”

Creo que la redactora sale en cacería de brujas a indagar por el muerto aguas arriba, y trata con todos sus medios de rendir contra la pared a un gremio, el avaluador, que busca e indaga por los precios probables de los inmuebles en Bogotá, y que siempre tratan y trataran de dar aquellos valores reales que más se ajusten a la realidad del momento analizado.

No se ha preguntado dilectísima redactora, que en el otorgamiento de un préstamo hipotecario, el valor del avalúo comercial de un inmueble es apenas un elemento fortuito de un préstamo, y que el climax del otorgamiento del préstamo está dado por la capacidad de endeudamiento del hipotecante ?

No se ha respondido dilectísima redactora, que el estudio del endeudamiento de un cliente hipotecario no le corresponde al avaluador del bien inmueble, sino a un personaje fantasmagórico, que entre bambalinas, por encima el bien y del mal, se encarga de hacer los estudios mínimos para determinar si el susodicho cliente estaría en condiciones de cumplir con unos pagos mensuales, anuales y así sucesivamente de por vida ?

No será que con las fallas que tratamos de atribuir a un gremio sencillo pero honesto, se busca esconder resortes oxidados interiores, de mal manejo, malas decisiones, malos otorgamientos e insanas determinaciones y adjudicaciones que dieron con el traste con la labor “altruista” de las entidades crediticias ?

Si la sapientísima redactora se toma el cuidado de hacer un análisis juicioso entenderá aritméticamente, que no importando que un inmueble valga cien millones o quinientos millones, el cliente hipotecario sólo recibirá una suma equivalente a un porcentaje inferior a su capacidad de endeudamiento, y que el inmueble en últimas sólo entrará a operar como aval cuando todas las otras condiciones impuestas al cliente fallen. ¿ Fallaron todas Doctora Patricia Cárdenas ? ¿ Y de los 4004 inmuebles entregados en dación de pago, doctor Carlos Forero, fallaron por el avalúo ?

Dónde éstas los responsables, estudiosos abogados, economistas y contables, que se dieron a la onerosa tarea de predecir el futuro económico y a dedo señalaron los beneficiarios de prestamos, y que ahora a la hora del hundimiento del barco que cargaba los 4004 préstamos, salen a denostar del gremio que les dio pautas avaluatorias, la última pauta, la del por si acaso, la de apagar la luz, la del nunca jamás ?.

Por Dios señores, seamos sensatos a la hora de buscar culpables, porque casi es más comprensible echarle la culpa al calor, al fenómeno del niño, a la sucesión de eclipses, y hasta a Ossama Ben Laden, que al único gremio que por irrisorias sumas ponen sus cabezas bajo el tridente de contestatarios como los aquí mencionados.
Ing. Civil Valentín Castellanos Rubio
RNA/L 01-319 LONJANAP
valentin@gmail.com

UN MAL EN TRANSMILENIO

UN MAL EN TRANSMILENIO

No sé si se trata de afinamiento del sentido del ruido, o exacerbamiento del mismo, pero he notado que el ruido en los buses de transmilenio se incrementó en los últimos tiempos, hasta el punto que incluso sostener una conversación se volvió inconversable.

Y no se piense siquiera en la posibilidad de sostener una conversación telefónica vía celular, porque además de informar a todos los pasajeros de los hechos privados, se enteran todos de los chascarrillos corrientes que se utilizan en una conversación informal. Hasta los chistes particulares de los cuales no tienen conocimiento la opinión pública, allí se deben oír descarnadamente. De verdad que me causa cierto sonrojo particular, oírlos, no por el ánimo discreto con que se pronuncian, sino por el efecto aleccionante sobre los demás concurrentes, que callan, no sé si por respeto o más bien por la prudencia de oír sin inmiscuirse directamente.

Pero el ruido existe, y sigue allí, persistente, incluso cuando las conversaciones vociferantes de los celulares se vuelven centrales telefónicas ambulantes, y se mete por entre los conductos auditivos, y siguen y suben y se meten al cerebro, y lo espuelean, y lo intranquilizan. Si, el ruido persiste, y en ocasiones llega a ser de la misma magnitud del tráfico que pasa raudo por las atafagadas avenidas principales.

Ha probado el DAMA medir tal magnitud de ruido ? Estoy seguro que sobrepasa las proyecciones más optimistas, y que los modernos buses de trasnmilenio sufren de un mal de ruido interior, que no es detectable a través de los tan famosos exámenes de certificación de gases.

MORALEJA: sustituimos los antihigiénicos buses del transporte público por enrojecidos vehículos modernos, que superaron todo, menos el ruido.