AL FIN SOLA ?

SEÑORITA, ¿ y a todas estas, como anda tu soltería ? Sí se siente, o en su defecto te pesa como una maleta llena de procesos y agendas y dictámenes y objeciones graves ?

Dirás que desde el valeroso lunes de fiesta, en que el mundo te vio por última vez liberada de las garras de los agentes masculinos del desorden, desde ese día los emails empezaron a escasear, qué digo, no solamente escasearon sino que se ausentaron como en una estampida de yo no fui.

Pero no creas tanta belleza, que igual me iba a preocupar por saber como asume tu existir la nueva composición del gabinete de tu vida, y para ello requerías tiempo para solazarte con tu nuevo estado, necesitabas tiempo para barrer en tu interior y en el exterior también, y mirar por la ventana de tu imaginación el cielo del nuevo día sin desasosiego y como esperanzador por lo tranquilo, quizá con la tranquilidad chicha de no saber que viene, pero no importa, algo vendrá, como cuando en una vía solitaria y alejada del todo, enmaletados, engafados y empañelotados, esperamos que pase el tren del alero a una hora disímil por lo inesperada, pero que ……… es mejor su espera a soportar las mismas horas de siempre, cuando en el acabose desde el principio preferiste morirte desde el primer día con tu suerte de otro.

Oh, ¡ que viva la vida !, y reconoce que tu soledad actual no tiene responsable, porque solo tu puedes hacerla y deshacerla, pero te mereces tus horas tan tuyas ahora que no quisiera embadurnártelas con mi tiempo a veces tan escabullante, y a veces tan ocasional que parece de juguete.

Y te burlas con tus burlas de segunda intención, como en el juego del gato y el raton de goma, desde tu torre de mando, mejorando tu juego y mejorando tu apuesta. No juegues a la vida, pero sí juégale a la realidad, y harás triqui.


Si ves el sol que en lontananza parece no querer irse, adivina quien es ?

Suerte mujer, te lo mereces todo, no lo derroches.