Humor para malhumorados:
Un ingeniero estaba cruzando una ruta un día, cuando un sapo lo llamo y le dijo:
"Si me besas, me volveré una hermosa princesa".
El ingeniero se inclino y tomó el sapo y se lo metió en el bolsillo. El sapo volvió a hablar, y dijo:
"Si me besas para que me vuelva una hermosa princesa, me quedaré contigo durante una semana".
El ingeniero sacó el sapo del bolsillo, le sonrío y lo volvió a meter en el bolsillo.
Entonces el sapo gritó: "Si me besas y me vuelvo una hermosa princesa, me quedaré contigo y haré CUALQUIER cosa que quieras"
Otra vez el ingeniero sacó el sapo, le sonrío y lo devolvió al bolsillo.
Finalmente el sapo pregunto: "Qué pasa? Te dije que soy una hermosa princesa, que me quedaré contigo por una semana y haré lo que quieras. ¿Por qué no me besas?"
El ingeniero dijo: "Mira, soy un ingeniero. No tengo tiempo para novias, pero un sapo que hable, ¡eso si que es interesante!"
miércoles, abril 28, 2004
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